lunes, 5 de noviembre de 2007

Sugerencias en tu alimentación para prevenir las migrañas

¿Qué sustancias provocan migraña?


Aminas biógenas

Algunos alimentos, como el chocolate, el vino, la cerveza o las conservas de pescado, cuentan con una alta concentración de aminas biógenas como la histamina, la tiramina, la feniletilamina o la serotonina. Su exceso en el organismo puede causar cefaleas. Por otra parte, la ingesta de tiramina junto con fármacos inhibidores de la monoaminoxidasa (IMAO) empleados en el tratamiento de la depresión o de la ansiedad, por ejemplo, puede desencadenar una crisis hipertensiva caracterizada por cefaleas.

Compuestos fenólicos

Presentes en productos como el chocolate, el té o el café, algunos compuestos fenólicos, como los flavonoides, anulan la acción de las enzimas que procesan las aminas biógenas, con lo que se produce un aumento de su nivel en el organismo y, por consiguiente, el riesgo de sufrir migraña.
Aditivos alimentarios
El glutamato monosódico y el aspartame se usan para ensalzar el sabor de los alimentos; el primero, como potenciador del sabor y el segundo como edulcorante. El glutamato y el aspartato, componentes químicos de dichos aditivos, son aminoácidos que actúan en el organismo como mediadores de la inflamación, lo que explicaría el inicio de la migraña asociada al consumo de productos que llevan estos aditivos, como los productos precocinados (pizzas, canelones?), golosinas o repostería, entre otros.


Migraña y alergia alimentaria

La asociación entre alergia alimentaria y migraña se investiga desde hace décadas. Ya en los años 30 se estableció que dos tercios de los de los pacientes con cefaleas experimentaban mejoras sustanciales con dietas de eliminación. El contacto entre el alérgeno -proteína del alimento que resulta tóxica para las personas con alergia- y un anticuerpo que fabrica el organismo, la inmunoglobulina E específica (IgE), da lugar a una mayor liberación celular de histamina y otras aminas, que provocan inflamación y que actúan como desencadenantes de la crisis de migraña en personas hipersensibles o alérgicas a ciertos alimentos. Entre los alimentos identificados como más alergénicos se encuentran la leche, huevos, pescado, marisco, frutos secos, leguminosas (cacahuete y soja), y algunas frutas (melocotón, albaricoque, ciruela, cereza, fresa y kiwi).

Una vez diagnosticada la alergia o la intolerancia alimentaria, la migraña puede desaparecer con una dieta de exclusión, en la que no se incluyan los alimentos alergénicos. Y si la persona no tiene alergia, pero sí hipersensibilidad a algún alimento, experimentaría una notable mejoría con la dieta.

No al ayuno prolongado

La hipoglucemia (nivel bajo de glucosa en sangre) provocada por el ayuno prolongado puede desencadenar migraña. La liberación brusca de insulina por el páncreas tras el consumo de alimentos ricos en carbohidratos (pan, galletas, patatas, legumbres, arroz y pasta) después de un ayuno prolongado, puede incrementar la disponibilidad de triptófano en el cerebro, a partir del cual se sintetiza una mayor cantidad de serotonina, cuya concentración se ve aumentada al inicio de las crisis.

Aquellas frutas que presentan una concentración notable de vitamina C o vitamina B2 pueden ejercer un efecto analgésico. Un buen zumo de naranja, pues, ayudará a aliviar el dolor de cabeza. Lo mismo podría decirse de los ácidos grasos insaturados que se encuentran en proporción variable en los frutos secos, en especial nueces y almendras.



1 comentario:

Andrea dijo...

Muy bien Silvia por vos que escribís sobre este tema de las migrañas, en general los médicos no le prestán tanta atención a la profilaxis que se puede hacer mediante la alimentación solo se centran en la parte farmacológica. Como nutricionista me parece bárbaro que puedas haber escrito sobre el tema. Saludos y felicitaciones de una colega Argentina.